La construcción del tren Panamá-David era una de las principales promesas de campaña del presidente electo, José Raúl Mulino y a menos de un mes de su posesión, la expectativa va en aumento. Expertos siguen evaluando la factibilidad del proyecto, pues con la deuda que registra el país, su ejecución podría depender del interés que manifieste la empresa privada.
Desde el gobierno de Juan Carlos Varela, había surgido la idea de construir un medio de transporte rápido que sumara eficiencia al largo trayecto desde la capital hasta Chiriquí. Sin embargo, aunque China manifestó indicios de interés, no se concretó una propuesta.
Ahora, con la pronta llegada de José Raúl Mulino al poder, se reactivaron las conversaciones. La prioridad del gobierno entrante sería realizar una obra con transparencia y que traiga beneficios para los panameños, en temas económicos, de turismo y desarrollo de la infraestructura, que además tendrían un efecto en la percepción de los mercados, aportando a la estabilidad financiera del país.
Fuentes afirman que ya se habría conformado un Comité en Chiriquí para convocar a empresas, países y demás interesados que podrían tener intensiones de invertir en el proyecto y formar parte de las licitaciones que se llevarían a cabo.
China reafirma su interés
En 2019, China realizó un estudio de factibilidad para la construcción del tren Panamá-David, a manos de la empresa China Railway Design Corporation. El entonces embajador, Wei Qiang, entregó los resultados del análisis al gobierno, pero en su momento no se concretó un acuerdo.
Ya en 2024, la empresa china, al reiterar su interés, admitió que, al tratarse de un tren que constaría de unos 400 kilómetros, sería una obra que requeriría del trabajo conjunto de varias empresas, debido a su magnitud.
“Cuando se abra el proceso de licitación, vendrán empresas de todo el mundo a querer participar del proyecto y que, hay compañías chinas como China Construction Company Corporation y otras que están cualificadas para participar, lo que hace que estén siguiendo muy de cerca este proyecto”, señaló la embajadora, Xu Xueyuan en una rueda de prensa, a mediados de mayo.
¿Cuál sería el costo de la construcción?
En una entrevista previa a las elecciones, el presidente entrante, José Raúl Mulino, aseguró que, de acuerdo a información que habría recibido, la construcción representaría un reto para el Estado, pues las cifras oscilarían los 4 mil y los 5 mil millones de dólares.
Asimismo, la propuesta que recibió Panamá durante la anterior administración, presentaba un costo total de unos 4 mil 100 millones de dólares. Una cifra que se acercaría al monto desembolsado para la ampliación del Canal de Panamá, que alcanzó los 5 mil 250 millones de dólares. Caso similar a la línea 3 del Metro que registraría un costo estimado de 4 millones de dólares.
“Estamos prestándole mucha atención a esa construcción. Nosotros esperamos que las empresas chinas puedan participar del proceso de licitación, en igualdad de condiciones”, añadió la embajadora de China.
Fuente: EcoTV